Consejos rápidos y sencillos para limpiar tu Mac
Los ordenadores Apple, tal como muchos otros dispositivos electrónicos en el mercado, suelen acumular una gran cantidad de datos y recursos que no se utilizan con frecuencia y terminan afectando al rendimiento del equipo. Esta clase de fallos de rendimiento se han incrementado a raíz del teletrabajo, con millones de personas utilizando sus ordenadores personales para trabajar.
Por esta razón hemos preparado una serie de consejos sencillos y prácticos que te ayudarán a deshacerte de todos estos archivos inútiles, liberando espacio de almacenamiento y acelerando los ciclos del CPU y la memoria RAM. A continuación, aprenderás a realizar una limpieza rápida a tu MAC de la forma más sencilla posible.
Contenido
Cómo limpiar tu MAC en unos pocos pasos
Limpia y organiza el escritorio
Uno de los errores más comunes de los usuarios es guardar en el escritorio una cantidad enorme de archivos que no son de uso frecuente, y lo que ocurre es que todos estos archivos son tratados como carpetas, por lo que no tardaremos en notar cómo se vuelve lento todo el ordenador. Deshacerse del exceso de archivos almacenados en el escritorio será de gran utilidad.
Vacía la papelera de reciclaje
Algo que muchos ignoran es que la papelera de reciclaje forma parte del almacenamiento general del dispositivo y funciona del mismo modo que lo hace el escritorio, especialmente en ordenadores Apple antiguos. Por tanto, al deshacernos de archivos, también será necesario vaciar la papelera de forma periódica.
Libera espacio en tu disco duro
Un disco duro saturado resulta molesto para el funcionamiento de un ordenador y tiene la capacidad de reducir hasta un 17,5% el rendimiento del dispositivo. Por tanto, una de las formas más sencillas de optimizar el funcionamiento es liberando espacio, algo que podrías hacer instalando un limpiador de MAC para poner a punto todos los sistemas del ordenador.
Borrar la memoria caché
La memoria caché es un tipo de memoria a la que nuestro ordenador tiene acceso de forma instantánea y que guarda datos que puedan ser de utilidad para cuando el usuario requiere realizar una acción específica. El problema es que con el uso frecuente, la cantidad de datos acumulada resulta abrumadora, por lo que borrar la caché del navegador puede aliviar al sistema.
Desinstala todas las aplicaciones que no utilizas
Si algo es cierto, es que al final del día no solemos utilizar ni la mitad de las aplicaciones que tenemos instaladas en el ordenador. Si este es tu caso, lo mejor que puedes hacer para optimizar el rendimiento del dispositivo es desinstalar todas las aplicaciones que utilizas con poca frecuencia y así lograr que el sistema vaya más rápido.
Busca y elimina los archivos ocultos en el disco
Finalmente, los archivos que permanecen ocultos en el disco consumen recursos en el ordenador sin que siquiera lo notemos. Estos se mantienen ocultos de forma intencionada y muchos de ellos son vitales para el sistema. Puedes deshacerte de aquellos que no sean indispensables para ganar rendimiento general.