Cuáles son los diferentes tipos de calderas que existen para la climatización de una vivienda
Un elemento esencial dentro de cualquier casa es la caldera, ya que permite poder mantener una buenos nuevos niveles de climatización dentro de la vivienda, en los meses más fríos del invierno. Pero para acertar al 100% con la compra de una caldera, es esencial tener en cuenta que existen diferentes tipos de calderas en el mercado, por las que podemos optar, y que cada una de ellas cuentan con unas características básicas diferentes en cuanto a funcionamiento, rendimiento o sostenibilidad.
Las calderas son aparatos importantísimos dentro de una vivienda, ya que cumplen una tarea tan esencial como la de poder proporcionar calor al entorno y obtener así unos buenos niveles de climatización para sus habitantes. Es por eso que a la hora de adquirir un aparato tan importante, que influye tanto en la calidad de vida de un hogar, es esencial tener en cuenta que existen diferentes tipos de calderas en el mercado entre las que vamos a poder elegir.
En general, esta clasificación se establece en función del tipo de combustible que la caldera necesita para funcionar y cómo se realiza la combustión en sí para obtener calor en la casa. Es por eso que podemos encontrar actualmente desde calderas de leña a calderas de gasoil, de gas, eléctricas, de biomasa o de policombustible, por mencionar algunos de los modelos más populares actualmente en el mercado. Vamos a conocer a continuación un poco más sobre el tema y cuáles son los diferentes tipos de calderas que existen.
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Gasoil, gas y eléctricas
En primer lugar, vamos a mencionar algunos de los modelos de calderas más utilizados actualmente en los hogares como pueden ser las de gasoil, gas o las eléctricas. Las calderas de gasoil son muy eficientes y económicas, perfectas para calentar lugares amplios y poder ahorrar a la vez, pero tienen el inconveniente de que tienen un sistema más contaminante.
Por otro lado, las calderas de gas son las más populares a día de hoy en muchos pisos, debido a su eficacia de más del 80% y a los pocos residuos que dejan. Aquí podemos encontrarnos varias subcategorías, pudiendo elegir entre atmosféricas, estancas, de bajo nox, de condensación, etcétera.
También tenemos a nuestra disposición las calderas eléctricas, que son una alternativa realmente cómoda para muchos usuarios y que permiten un nivel de programación muchísimo más detallado que en otros modelos, gracias a su termostato. Además, su consumo no es demasiado caro y viene incluido directamente en la factura de la luz para mayor comodidad.
Biomasa, carbón, leña y vapor
Las calderas de biomasa son aquellas que necesitan algún tipo de combustible físico para poder producir calor, como pellets o astillas de madera. En esta categoría de biomasa también nos encontramos con las calderas policombustible, que cuentan con la ventaja de que admiten para su funcionamiento otro tipo de residuos o elementos orgánicos, como huesos de aceitunas, cáscaras de almendras, etcétera.
Las calderas de leña son otra opción muy interesante, sobre todo cuando vivimos en zonas rurales donde tenemos un acceso constante a leña para quemar y no tenemos que comprarla. El uso de las calderas de carbón ha ido disminuyendo con el paso del tiempo, debido a sus altos niveles de contaminación, aunque existen nuevos modelos que incorporan mecanismos muy novedosos, los cuales limpian muchísimo mejor el sistema de estas calderas para conseguir que sean más beneficiosas para el medio ambiente.
Por último, cabe mencionar también las calderas de vapor, que cuentan con un nivel de eficiencia muy alto. En este sentido, lo que hay que tener en cuenta es que en función del tipo de combustible que utilicemos para generar el vapor, su sostenibilidad podrá ser más alta o más baja. Por lo que se trata de un factor muy importante, que merece la pena tener en cuenta antes de adquirir una de estas calderas para nuestro hogar.