¿Por qué tienes que reparar tus electrodomésticos?
Una pregunta que muchas veces queda resonando cuando sufrimos una avería importante en nuestros hogares.
Para comenzar a responder esta cuestión hay que ir al nacimiento del problema. Hoy en día todas las casas de familias utilizan electrodomésticos. Siempre hay buenas opciones, desde el momento en el que nos ayudan en nuestra rutina, la facilidad para crear comidas, para lavar ropa o vajilla, o simplemente por agilizar las tareas domésticas que más nos cuestan manejar. Ahí están presentes los electrodomésticos.
Siempre se evalúa la posibilidad de comprar uno nuevo, pero los valores de estos suelen superar la disponibilidad de las personas. Es entonces cuando aparece la otra solución: reparar los electrodomésticos.
Muchas veces, ya sea por el uso incorrecto o porque la vida útil del artefacto está llegando a su fin, no encontramos con que necesitan atención de un especialista. Opciones hay miles, pero uno debe encontrar en la persona que entre a su hogar, la confianza y la experiencia para que el trabajo dure lo mínimo posible, sea efectivo y todos los integrantes del grupo familiar se sientan cómodos con el técnico. Entre esos miles, se destacan los expertos de SobreSeguro.es por la cantidad de sucursales en todo el país, su garantía extendida y la efectividad en la resolución de los problemas de las marcas top del mercado.
Un detalle a tener en cuenta es el mantenimiento de los electrodomésticos, su limpieza, por ejemplo. Aires acondicionados, lavadoras, lavavajillas y campanas de cocina en 80% de las veces dejan de funcionar por contener residuos propios de realizar su función.
Existe un surtido de pequeños artefactos eléctricos, marcas y opciones que cuesta decidir al momento de reparar o tirar. Ante la primera falla, por más pequeñas que fueran, siempre aparece como primera solución comprar uno nuevo, y ahí radica el error. Primero habría que analizar y entender por qué se estropean los artefactos, si estos funcionaban de maravillas.
Ese tipo de fallas tiene un nombre: obsolescencia programada. Lamentablemente la durabilidad de los artículos de nuestro hogar tiene una programación para que dejen de funcionar total o parcialmente. Los fabricantes planifican la vida útil del artefacto eléctrico, lo que en otras palabras es darte un día para que deje de ser funcional.
Un claro ejemplo de esto son los celulares. Los primeros duraban muchísimos años, y los más novedosos tienen una vida útil inferior a los dos años, como mucho. Lo primero que falla es la batería, o la pantalla o algunos componentes soldados a las placas.
Por otra parte, las empresas fabricantes proveen de repuestos originales y piezas de recambio sabiendo que esto es una realidad. Por ello es importante considerar el valor futuro y aproximado de los repuestos.
En la actualidad la conciencia del impacto medioambiental, es un gran paso hacia los nuevos pensamientos y elecciones de vida saludable. Al reparar los electrodomésticos uno está ayudando a que no haya basura tecnológica. El uso cuidadoso de los electrodomésticos y el mantenimiento adecuado está en pleno auge.
La modernidad puede llegar con el cambio de algunos componentes, no hace falta comprar una novedad por el simple hecho de una publicidad. La mejor manera de tomar conciencia con la basura electrónica es evitar desechar los electrodomésticos de nuestros hogares.